De momento, el conjunto azulgrana, que se despidió de 2021 en la octava plaza de la tabla, a 18 puntos del Madrid y 11 del Sevilla, ya ha vuelto a subir a la segunda plaza superando al deprimido conjunto de Julen Lopetegui, eliminado por el West Ham en la Europa League y apenas han ganado dos de sus últimos 10 partidos ligueros para trasladar la euforia de principios de febrero (cuando se fueron con cuatro puntos de ventaja), a la realidad actual.
Si el fútbol es un estado de ánimo, el Barcelona no puede ser mejor a la hora de la verdad de la temporada. Lleva 14 jornadas imbatido y seis victorias ligueras consecutivas, manteniendo un nivel de juego más que notable y demostrando de lo que es capaz en el propio Bernabéu.
“Si Xavi hubiera llegado a principio de temporada…”, se lamentaba no hace mucho Joan Laporta, admitiendo que le pudo haber faltado el coraje y la valentía de sus días mozos para dar un cambio de rumbo a la dirección de un equipo que da la sensación de que la Liga se trunca.